Foru Emparantza Plaza, 11
Tfn 943 557 867 Precio orientativo: desde 30 € + IVA |
Goiko Itturri
5,0 - Calidad, atención. |
LOCAL
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Acceso:
Accesible
Aparcamiento:
Fácil
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Espacio:
Mediano (60p)
Terraza |
Distribución:
Amplia
Iluminación:
Buena
|
Mobiliario:
Cómodo
Sillas Perchas |
Limpieza lavabo:
Buena
Secador de manos:
Papel
|
Cambiador:
No
Extras:
Revistas
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PERSONAL
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CARTA
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Vestuario:
Uniforme
|
Amabilidad:
Sí
|
Eficacia:
Sí
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Presentación:
Clásica
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Vinos y cava:
De la Tierra
De otras tierras |
Otros:
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IDIOMAS
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Castellano
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Euskera
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Desde que descubrimos el Goiko Itturri cada vez que voy a Eskudi hacemos una parada para disfrutar de los platos de Maixol y especialmente de su tortilla de bacalao.
Situado al lado de la plaza del ayuntamiento y un frontón, subiendo una cuesta está la enorme casa que alberga el restaurant. Lejos de la restauración de moda, esos "restaurantes canalla" de decoración industrial en mesas desnudas con platillos a compartir entre griterío, en el Goiko se respira tranquilidad entre manteles blancos, amplitud en las mesas y tradición en la cocina en platos que perfectamente podrías compartir.
Teniendo en cuenta la materia prima que entra en la cocina los precios no son nada desorbitados, claro que tienen que actualizar la carta porque no está el IVA incluído. En esta visita a Euskadi me fijé que en otro par de restaurantes pasaba igual, ¿será una costumbre del país?
En esta cuarta visita cambiamos algunos platos de lo que pedimos cada año. Si queréis echar un vistazo a anteriores visitas podéis hacier clic en Goiko 2015 y Goiko 2017. En el 2016 no publiqué reseña porque eran los mismos platos que en 2015.
Al llegar te reciben con una tapa de ensaladilla rusa que tomamos con una cerveza y una copa de vino.
Empezamos la comida con unos entrantres a compartir: un foie micuit con mermeladas y pan tostado y una ensalada tibia de hongos. ¡Que buena la ensalada cuando es lechuga de verdad y no de bolsa!. Y por supuesto, la tortilla de bacalao, que es de las que permanecen en la memoria del gusto.
Como plato individual, un solomillo con foie para mi hija (ella no varía el plato), y un rodaballo a la donostiarra para Santi y para mi.
Todo eso con un pan buenísimo que elaboran ellos mismos y una botella de Txomin Etxaniz, D.O. Guetaria Txakolina. Un vino con muy buena relación calidad-precio. Para postres, cuajada de leche de oveja para las féminas y como Santi no acababa de decidirse entre la tarta de queso Idiazábal y el púding de manzana, Aitor le ofreció media de cada. Imposible negarse.
La cuenta, ya con IVA, 134 € para tres, llegó con una botella de patxarán casero para tener una sobremesa sin prisas. Un restaurante al que siempre volveremos y en el que nos quedan platos para probar como el arroz con hongos o una buena chuleta. ¡¡Gracias Maixol por tu tortilla de bacalao!!
Situado al lado de la plaza del ayuntamiento y un frontón, subiendo una cuesta está la enorme casa que alberga el restaurant. Lejos de la restauración de moda, esos "restaurantes canalla" de decoración industrial en mesas desnudas con platillos a compartir entre griterío, en el Goiko se respira tranquilidad entre manteles blancos, amplitud en las mesas y tradición en la cocina en platos que perfectamente podrías compartir.
Teniendo en cuenta la materia prima que entra en la cocina los precios no son nada desorbitados, claro que tienen que actualizar la carta porque no está el IVA incluído. En esta visita a Euskadi me fijé que en otro par de restaurantes pasaba igual, ¿será una costumbre del país?
En esta cuarta visita cambiamos algunos platos de lo que pedimos cada año. Si queréis echar un vistazo a anteriores visitas podéis hacier clic en Goiko 2015 y Goiko 2017. En el 2016 no publiqué reseña porque eran los mismos platos que en 2015.
Al llegar te reciben con una tapa de ensaladilla rusa que tomamos con una cerveza y una copa de vino.
Empezamos la comida con unos entrantres a compartir: un foie micuit con mermeladas y pan tostado y una ensalada tibia de hongos. ¡Que buena la ensalada cuando es lechuga de verdad y no de bolsa!. Y por supuesto, la tortilla de bacalao, que es de las que permanecen en la memoria del gusto.
Como plato individual, un solomillo con foie para mi hija (ella no varía el plato), y un rodaballo a la donostiarra para Santi y para mi.
Todo eso con un pan buenísimo que elaboran ellos mismos y una botella de Txomin Etxaniz, D.O. Guetaria Txakolina. Un vino con muy buena relación calidad-precio. Para postres, cuajada de leche de oveja para las féminas y como Santi no acababa de decidirse entre la tarta de queso Idiazábal y el púding de manzana, Aitor le ofreció media de cada. Imposible negarse.
La cuenta, ya con IVA, 134 € para tres, llegó con una botella de patxarán casero para tener una sobremesa sin prisas. Un restaurante al que siempre volveremos y en el que nos quedan platos para probar como el arroz con hongos o una buena chuleta. ¡¡Gracias Maixol por tu tortilla de bacalao!!
Que bona és la truita de bacallà quan està ben feta (i què pocs llocs la fan com cal...). Ara fa temps que no em marco una...
ResponEliminaEl vi aquest, me'l van recomanar fa un munt d'anys al Celler de Gelida a Barcelona, però ja no l'he tornat a demanar. Tampoc em maten massa els txacolís...
I si actualitzen la carta per afegir l'IVA, els pots comentar que aprofitin per fer també un canvi de disseny.... ;-)
Salut!!
hahaha, sí, el format de la carta no pot ser més demodé. :-) Però els plats que anomena són deliciosos.
EliminaSalut!
Doncs a mi aquest menú, sembla fet a la meva mida.... Potser canviaria el filet, per algun tall més "potent", però em puc adaptar... i la truita de bacallà ja la faria ara per esmorzar...
ResponEliminaSalut!!
Aquesta truita és difícil de superar però no dubto pas de les teves nocions de cuiner, i molt menys ara que tens un professor particular: el xef del Cal Malcarat :-D
EliminaSalut!